Cuando pienso en una organización ideal, pienso en el tipo de relación que quiero madurar con la gente con la que trabaje, y que tipo de gente tendría que ser esa.
Algo que vengo repitiendo mucho ultimamente cuando describo esta situación, es “No quiero criar empleados“, ojo, que el lector no me malentienda. Paso a explicar mi punto:
Creo que todos somos creativos por naturaleza. Algunos más, otros menos, pero todos tenemos un nivel de creatividad en nuestro ADN. El tema es que si en nuestro trabajo no tenemos espacio para ser creativos, vamos a serlo en otro lado: nuestras casa, otros proyectos, etc.).
Creo que este inconveniente, es uno de los que más colabora a que las personas solo vayan a la oficina por la paga, y a cumplir horario.
Cuando decía que no quiero criar empleados, me refería justamente a eso. Tampoco sueño con el otro extremo, y que todos vengan y sean creativos porque “solo” les pido que lo sean.
Mi concepto, va más allá: Todos tenemos un sueño, un lugar al que queremos llegar (personal, profesional, etc.), el problema es que las compañias generalmente nos preguntan a donde queremos llegar y cuales son nuestros objetivos, pero muchas veces lo que quieren escuchar es que queremos trabajar eternamente para ellos.
¿No es más fácil si somos sinceros con nosotros mismos? Quiero decir, como empresa, y como personas. Si como empresa, pregunto de corazón que querés hacer en 10 años, pero con el fín de ayudarte en el camino, aumentan las posibilidades de que la respuesta sea “Tener mi propia consultora IT”, o “Ser músico profesional”. ¿No nos sirve a todos? Porque como empresa, al colaborar a que ese sueño se cumpla (brindando capacitación, entrenamiento, mentoreo, etc.) la persona va a trabajar mucho más contenta y motivada, y se va a comprometer al máximo con la causa.
Me gustaría rodearme de gente que tiene un sueño superior, que hoy está trabajando conmigo, para sumar experiencia y adquirir competencias para alcanzar ese sueño. Busco gente que desafie paradigmas y estructuras, y que busque siempre la forma de mejorar. Busco gente que necesite un medio para su sueño, no solo un trabajo. Busco un empleado emprendedor.
Abrazo!
PD: Agradezco a Fer Cambas y Adolfo Fioranelli que en el post anterior me avisaron de algunas correcciones ortográficas necesarias. Gracias 😀 !!
La verdad que bueno que halla lideres en organizaciones grandes que tengan este tipo de filosofias; realmente seria genial poder cultivar mas este tipo de practicas y los resultados de las organizaciones en general serian realmente grandiosos ya que todos estariamos (directa o indirectamente) buscando el mismo objetivo.
Saludos!
Muy bueno lo que expresas.Te doy mi opinión de este tema aunque nunca trabajé en relación de dependencia y como estoy armando el equipo para mi proyecto personal,considero a mis futuros empleados como socios, con lo cual coincido con vos con el término de empleados emprendedores.Entiendo que esto no quieren las empresas actuales y cuando tienen que decidir entre tomar a un empleado emprendedor y otro que no lo es,prefieren a este último ya que piensan que un emprendedor tarde o temprano se les va a ir con el now how aprendido y con la inversión que hicieron. No quiero extenderme pero es la sensación que tengo.El empresario solo paga sueldos y nunca reparte las ganancias con sus empleados como debería hacerlo.Hasta que este concepto de inteligencia y crecimiento colectivo no cambie,cada vez le resultará mas difícil a la empresas retener empleados.Por supuesto es solo mi humilde punto de vista.Abrazo!
Yo creo que mas que ser creativos, todos tenemos un potencial creativo, y que a la larga, la creatividad es como muchas otras cualidades. Mientras mas posibilidades haya de ejercitarla, mas cómodos nos vamos a sentir con ella y mas la vamos a poder usar, mas la dejaos de lado, mas se atrofia.
La clave es incentivarla, aunque, dado a que todos podemos ser creativos por motivos distintos, no siempre es fácil dar el reonocimiento que la persona espera.
Uno puede ser creativo por los beneficios, otro puede tratar de ser creativo por mera curiosidad, y hasta se puede ser creativo por miedo.
Ya me extendí mucho, Saludos, y feliz día.
2 situaciones comunes:
a) Entrevista de trabajo:
-Dígame señor García, ¿cuáles son sus expectativas a nivel profesional?
-Ser líder de una multinacional como ésta.
b) Negación
En muchos casos suele ocurrir que aún dándonos cuenta de que podemos hacer algo creativo por nuestro trabajo nos negamos a hacerlo por diferentes motivos. Entre ellos puedo citar el famoso “tengo que hacer más por la misma plata”, o bien “todo lo que cree acá va a ser de la empresa y no mío”.
Con esto quiero decir que aún teniendo un lado creativo, el ser humano tiene el poder adicional de escoger en donde quiere explotarlo. Pero ojo, hay veces que de tanto elegir, nos quedamos con el potencial sin desarrollar…
Imposible no acoplarme al comentario de Wally… y yo creo que el señor García no está tan loco (aunque no sé qué tan aceptable sea decir algo así en una entrevista de trabajo). ¿Por qué debería contentarse con menos? Por más inalcanzable que parezca una meta, si García se cree capaz de ir aprendiendo en el camino las herramientas suficientes como para dirigir la multinacional, no veo por qué debería -en su interior- aspirar a mucho menos. ¿Qué tal si el trabajo que consigue hoy es el primer paso de su sueño? Probablemente no llegue tan lejos, pero en su afán va a llegar más lejos que otro que apunte únicamente a un buen sueldo y un trabajo estable.
Acerca del empleado emprendedor, no creo que exista por sí solo: la incentivación que menciona Facu es vital. En mi escasa experiencia -no exclusivamente IBM-, el empleado es emprendedor por naturaleza hasta que la propia compañía se encarga de ponerle un freno, ya sea porque algún emprendimiento requiere mucho esfuerzo, ya porque el reconocimiento recibido no es el esperado. Otra vez me voy a acoplar a lo que dice Wally: “el ser humano escoge en donde quiere ser creativo” y el “tengo que hacer más por la misma plata” para mí van por la misma senda. Poné el esfuerzo que quieras (tiempo, inventiva) y la recompensa que quieras (plata, una palmada en el hombro), depende del empleado en particular.
Está bueno trabajar con gente que tiene un sueño superior, pero es más difícil mantenerla proactiva: sin motivación, un empleado creativo se transforma tarde o temprano (depende de su paciencia y su ambición) en uno que trabaja por la paga a cumplir horario.