El lunes pasado escuché en el programa radial Perros de la Calle donde su conductor, Andy Kusnetzoff hacia referencia a un estudio (no tengo más información, sorry… si alguien sabe algo, por favor pasenme algún link) donde decían que no necesariamente la gente de mayor estudios era más inteligente que aquellos que no habían tenido la oportunidad de estudiar carreras de grado, maestrías, etc. Lo que marcaba Andy era que las personas que rotulamos como “inteligentes”, en muchos casos en realidad es porque tienen muy buena dicción y tienen adquiridas herramientas lingüísticas que les permiten expresarse muy cómodamente.
Me dejó pensando en las personas que -a mi juicio- no identifico con una inteligencia especialmente remarcable, y también en aquellos/as que admiro por su inteligencia. Debo admitir que me sorprendí, ya que he caído en esta trampa alguna vez. Muchas de esas personas “inteligentes” en realidad saben y/o pueden articular muy bien sus ideas, pero la idea en si misma quizás no es tan valorable como el mecanismo como se expresó.
O en criollo: ¡Muy buenos vendedores!
Por el otro lado tenemos a los que quizás no somos tan buenos “vendedores” y quizás carecemos de esas herramientas lingüísticas que nos hacen parecer inteligentes, pero eso poco tiene que ver con el valor (ya sea inmenso o pequeñísimo) de nuestras ideas.
Muchas veces decimos: – ¿Cómo puede estar esa persona en ese cargo?? Si no puede ni hablar!!
Quizás esta teoría lo explique!
¿Qué les parece?
Una prueba es que yo estuve en IBM sin tener el secundario completo. Remember? Y fue gracias a vos 🙂
Sinceramente, no lo sabía. En una empresa como IBM creo que éramos muchos los que confiábamos que el proceso de reclutamiento una vez enviado tenía ese tipo de controles. Por lo visto, no es así. Haberlo sabido antes y hubiera hecho algún tipo de check, por lo menos para tenerlo presente. Saludos!
Me parece que vos no sabes ni escribir. Flaco pasale un corrector al texto antes de publicarlo !!
Fernando, muchas gracias por tu aporte. Ya que detectaste faltas de ortografía te molestaría compartirlas? Gracias por colaborar y disculpa que no esté a la altura de lo que vos esperas encontrar en un blog. Ya mismo hablo con mi editor, esto no puede seguir pasando! Saludos.
Totalmente de acuerdo Rodo. Lo que pasa es que muchas veces tenemos la pereza de criticar o poner en duda ciertas frases, ciertas palabras o ciertas ideas que construyen esos “vendedores”. Quizás por miedo a poner en evidencia que no tenemos la misma habilidad en la dialética o en la oratoria, quizás por miedo a parecer inferiores, a quedar mal o peor aún: a aprender.
Te recomiendo el libro de Arthur Schopenhauer: “El arte de tener razón (como ganar una discusión teniendo razón o no)”, está muy bueno para detectar esos “chamuyos” de todos los días que a veces nos pasan inadvertidos. Saludos!
Coincido en la idea general, pero no la ataría al tema de la educación en si misma, el tema de parecer inteligente o venderse como tal pasa mucho por la personalidad y por algo de instinto también.
Además que queremos decir cuando enrotulamos a una persona como inteligente? en cuales de todos los tipos de inteligencia se destaca?
Mi punto de vista: Lo mejor es dejar que los actos hablen por si mismos.
Según Perelman el portador de la verdad es el que argumenta mejor en una discusión. 😉